La vuelta al trabajo, después de las vacaciones.
Si al llegar de vacaciones te sientes cansado, con falta de apetito, concentración, sueño, estás fatigado… Si a nivel mental estás irritable, triste, desmotivado, nervioso… Puede ser que padezcas el síndrome postvacacional.
Se puede definir como el estado que se produce en el policía al fracasar el proceso de adaptación entre un periodo de vacaciones y de ocio con la vuelta a la vida activa, produciendo molestias que nos hacen responder a nuestras actividades rutinarias con un menor rendimiento.
Para prevenir este síndrome, los sanitarios aconsejan no alargar las vacaciones hasta el día anterior de empezar a trabajar. Se recomienda volver de vacaciones un par de días antes para que la adaptación a la rutina sea más paulatina, empezando a habituarnos nuevamente a los ritmos de sueño y comida.
Es conveniente desarrollar alguna actividad de ocio que sea compatible con el trabajo para que no sea tan brusco el cambio y tomarse tiempo para arrancar y volver a coger el ritmo que se tenía antes de vacaciones. Así como una actitud positiva del descanso, del trabajo y de la vida en general. Busca algún proyecto personal, familiar, laboral. Aprovecha el cambio y enriquécete.